Calendario lunar de agosto 2025 en México: Luna negra, lluvia de meteoros y conjunciones planetarias
Durante agosto de 2025 viviremos noches mágicas con la Luna negra, adeás de las Perséidas, la lluvia de estrellas más vistosa del año, Mercurio en máxima elongación y conjunciones planetarias espectaculares.

Si bien la temporada de lluvias ha tenido bastante actividad, hay momentos en los que las nubes nos dan una tregua y nos dejan ver entre pequeñas ventanas un poco del cielo de verano. En agosto tendremos un fenómeno no tan común cuando de la Luna hablamos.
Y es que si bien el mes arranca con una Luna en fase creciente, es decir, que la podremos ver al atardecer en el cielo Oeste, sólo tendremos que esperar al 9 de agosto para disfrutarla, si las condiciones del clima lo permiten, en su fase llena, mostrándonos su rostro completamente iluminado por el Sol.
Tras ese punto máximo, el brillo lunar comenzará a menguar hasta llegar al cuarto menguante que sucederá el 16 de agosto, con lo que su silueta se irá reduciéndo noche tras noche, permitiendo que otras luces celestes —como las estrellas y meteoros— destaquen con mayor claridad en el firmamento nocturno.
El 23 de agosto ocurrirá un fenómeno particular, una Luna nueva que se considera “Luna negra” por ser la tercera de éstas, dentro de una misma estación astronómica en la que ocurrirán 4 en total. No es visible a simple vista, pero sabemos de su presencia gracias al cielo completamente estrellado.

Este tipo de novilunio permite una observación astronómica más favorable, sobre todo para detectar objetos de bajo brillo como cúmulos, galaxias o lluvias de meteoros. Es una noche ideal para apuntar telescopios o simplemente tumbarse a contemplar el cielo sin la interferencia de la luz lunar.
Una lluvia en verano, pero de estrellas
Agosto también es famoso por una de las lluvias de meteoros más espectaculares del año, las Perseidas, que si bien están activas desde mediados de julio hasta el 23 de agosto, alcanzan su punto máximo entre las noche del 11 al 13, justo en la fase menguante de la Luna.
Las Perseidas provienen del cometa Swift-Tuttle y cuando el planeta cruza su estela de partículas, la atmósfera terrestre las vaporiza, generando trazos luminosos y fugaces que cruzan el cielo, lo impresionante es que en condiciones ideales, se pueden observar más de 100 meteoros por hora.
Este año, la Luna iluminada en un 84 % durante el pico reducirá la visibilidad de los meteoros más débiles, pero aún será posible disfrutar de los más brillantes. Para observarlos, lo mejor es mirar hacia el noreste, en una zona oscura y libre de luces artificiales.
Y la mejor hora para apreciarlas será después de la medianoche y antes del amanecer. Como siempre lo mencionamos, no se necesita telescopio ni equipo especial para deleitarnos con este tipo de fenómenos astronómicos, basta con recostarse, dar tiempo a que los ojos se adapten y esperar con paciencia el paso de las trazas más brillantes.
Un visitante al alba
El 19 de agosto, Mercurio alcanzará su máxima elongación occidental. Esto significa que estará en su mayor separación angular respecto al Sol, y podrá verse justo antes del amanecer. Cabe mencionar que será uno de los mejores momentos del año para observar al pequeño planeta rocoso.
Desde Ciudad de México, el planeta será visible mirando hacia el Este, cerca del horizonte, entre 30 y 40 minutos antes del amanecer, un par de días después, el 21 de agosto, alcanzará su mayor altura aparente, aproximadamente a unos 17 grados sobre el horizonte.

Mercurio no es fácil de observar, ya que siempre se encuentra cerca del Sol desde nuestra perspectiva. Sin embargo, en elongaciones como esta, su brillo lo hace destacar brevemente en el cielo matutino, siempre que las condiciones de visibilidad sean favorables.
Si las nubes lo permiten, también será posible ver a Venus y Júpiter en la misma franja del cielo, creando una alineación parcial de planetas al amanecer. Aunque breve, esta ventana de observación vale la pena para quienes disfrutan del cielo antes del amanecer.
Encuentros fugaces en el cielo
El 12 de agosto será un día notable en el cielo ya que poco antes del amanecer, Venus y Júpiter estarán en conjunción, acercándose visualmente a menos de un grado. Ese mismo día, durante la noche, la Luna se acercará a Saturno, regalando una escena brillante y elegante hacia el Este.
La conjunción de Venus y Júpiter ocurre en el cielo matutino, y puede observarse a simple vista. Son los dos planetas más brillantes, y su cercanía creará una especie de “doble estrella” antes del amanecer, sin duda alguna es uno de los eventos visualmente más atractivos del mes.
Días después, el 20 de agosto, la Luna se encontrará con Venus en el cielo del amanecer, una conjunción que se verá mejor justo antes de la salida del Sol, y será ideal para fotografiar. Esta vez, la delgada Luna menguante acompañará al planeta más luminoso del cielo.
Estos encuentros, aunque breves, nos recuerdan la dinámica constante del sistema solar y los movimientos orbitales que permiten que estos cuerpos celestes se crucen en el cielo, ofreciendo espectáculos simples pero poderosos. Si las nubes nos dan tregua, agosto nos regalará varios momentos para desmañanarnos.