¿Debería recibir una dosis de refuerzo contra el sarampión? Esto es lo que dice la ciencia

Ante el reciente brote de sarampión en el país, los especialistas hacen algunas recomendaciones, pero antes hablemos de esta enfermedad. El sarampión es una enfermedad vírica sumamente contagiosa. Se propaga fácilmente cuando una persona infectada respira, tose o estornuda. Puede provocar una enfermedad grave, complicaciones o la muerte.

El sarampión puede afectar a cualquier persona, pero es más común entre los niños. Antes de propagarse por todo el cuerpo, el virus infecta las vías respiratorias. Entre los síntomas se incluyen fiebre alta, tos, secreción nasal y una erupción cutánea que se extiende por todo el cuerpo.

Vacunarse es la mejor manera de evitar contraer el sarampión o contagiar a otras personas. A decir de la Organización Mundial de la Salud, la vacuna es segura y ayuda al cuerpo a combatir el virus. El biológico ha evitado más de 60 millones de muertes entre 2000 y 2023.

A pesar de que existe una vacuna segura y eficaz, en 2023 hubo 107 mil 500 fallecimientos por sarampión en todo el mundo, sobre todo niños menores de cinco años no vacunados o que no habían recibido el esquema completo de vacunación. En 2023, el porcentaje de niños que recibieron la primera dosis de la vacuna contra el sarampión fue de tan sólo el 83 por ciento, muy por debajo del 86 por ciento de 2019.

Según datos de la OMS, antes de que se introdujera la vacuna contra el sarampión en 1963 y se optara por la vacunación generalizada, cada dos o tres años se producían epidemias importantes que causaban alrededor de 2.6 millones de muertes cada año.

La intensificación de las actividades de inmunización por parte de los países, la OMS, la Alianza contra el Sarampión y la Rubéola (denominada antiguamente Iniciativa de Lucha contra el Sarampión y la Rubéola) y otros asociados internacionales logró evitar una cifra estimada de 60 millones de muertes entre 2000 y 2023. La vacunación redujo el número de muertes por sarampión, que pasaron de 800 mil 062 en 2000 a 107 mil 500 en 2022.

Tratamiento

Al no existir un tratamiento específico para el sarampión, los cuidados deben centrarse en aliviar los síntomas, hacer que la persona se sienta cómoda y prevenir complicaciones. Se recomienda estar bien hidratados, bebiendo agua en cantidad suficiente y los tratamientos para combatir la deshidratación pueden compensar la pérdida de líquido debida a la diarrea o a los vómitos. También es importante seguir una dieta sana.

Ahora si, la recomendación de los especialistas de la Organización Mundial de la Salud es que todos los niños o adultos con sarampión deben recibir dos dosis de suplementos de vitamina A, con un intervalo de 24 horas entre ambas. Esto permite restaurar los niveles bajos de vitamina A incluso en el caso de niños bien alimentados.

Asimismo puede ayudar a prevenir las lesiones oculares y la ceguera. Los suplementos de vitamina A también pueden reducir el número de muertes por sarampión. La vacunación a nivel de toda la comunidad es la forma más eficaz de prevenir el sarampión. Debería vacunarse a todos los niños contra el sarampión. La vacuna es segura, eficaz y de bajo costo.

Los niños deberían recibir dos dosis de la vacuna para garantizar que son inmunes. La primera dosis se suele administrar a los 9 meses de edad en los países donde el sarampión es común y entre los 12 y los 15 meses en otros países. Debería administrarse una segunda dosis más adelante, generalmente entre los 15 y los 18 meses.

Referencia de la noticia:

Sarampión . (s/f). emitido el 14 noviembre 2024, de https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/measles