Las líneas de turbonada en el Golfo de México

Estos complejos sistemas de tormenta causan tiempo severo, como por ejemplo vientos fuertes, granizadas y hasta trombas marinas. Son de alto riesgo para la navegación y zonas costeras.

Tormenta
Las "lineas de turbonada" pueden tomar por sorpresa a las zonas costeras.

Principalmente en los meses de abril y mayo se presentan en el Golfo de México y sus costas, violentas tormentas a las que se les llama “líneas de turbonada”. Dichos sistemas pueden causar tiempo severo y daños importantes en la zona costera, además de ser un riesgo para la navegación.

En la Primavera, se gestan tormentas significativas en la zona fronteriza de nuestro país con Estados Unidos, particularmente asociadas a la convergencia de humedad que se presenta por vaguadas, líneas secas o sistemas frontales. Independientemente de su origen en superficie, estos sistemas de tormentas siguen el flujo de vientos en niveles medios y altos de troposfera, con dirección de oeste a este, y si llegan a tener mucha intensidad, salen al golfo de México como un sistema convectivo a mesoescala.

Una vez en el mar, factores como una constante advección de aire húmedo en capas bajas, altos niveles de evaporación del Golfo de México y la mencionada dinámica y cizalladura de los vientos en el interior de los sistemas, pueden mantener viva a la tormenta varias horas. En su interior se manifiestan corrientes descendentes que generan vientos intensos, trombas marinas, granizo, actividad eléctrica abundante y lluvia intensa.

Por los efectos anteriormente descritos, son un riesgo para los navegantes y zonas costeras, sobre todo cuando asaltan sorpresivamente, causando daños a embarcaciones y a estructuras cercanas a la playa. A veces, estos sistemas logran penetrar tierra adentro generando algunas tormentas severas.

¿Cómo identificarlas y prevenirse?

Los meteorólogos inicialmente ubican alguna situación sinóptica sobre el norte o noreste del país que esté asociada con interacción entre sistemas meteorológicos de superficie e inestabilidad en niveles superiores, los suficientemente significativos para causar tormentas severas de gran extensión.

La mejor opción para seguir una "línea de turbonada" es mirar las imágenes de satélite y comportamiento de los vientos en niveles superiores.

Una vez confirmado el sistema de tormentas, hay que darle un seguimiento puntual con imágenes de satélite para seguir su desplazamiento. Es muy útil analizar los análisis y pronóstico de vientos en niveles medios y altos para determinar su trayectoria. En muchas ocasiones los modelos numéricos de predicción no visualizan su formación o posible intensificación, por lo que es muy importante el monitoreo con sensores remotos.

Finalmente, otro factor de riesgo es que mayormente las autoridades portuarias emiten avisos cuando se aproxima un sistema frontal o “norte” a las costas, fenómeno mucho más evidentes y ciertamente más fáciles de pronosticar. Sin embargo, las “líneas de turbonada” en ocasiones se presentan sin ningún frente y tomando por sorpresa a los navegantes, siendo uno de los fenómenos hidrometeorológicos más temidos por los hombres del mar.