El tesoro oculto de la Riviera Maya: ríos subterráneos y cuevas milenarias por descubrir

Un complejo sistema de ríos subterráneos con una amplia extensión de casi 40 kilómetros y conformado de amplias cámaras semi inundadas; visitarlo es una experiencia única en la vida.

Dentro del territorio de Playa del Carmen se encuentra este maravilloso lugar. Imagen tomada de Sec. de Turismo Playa del Carmen en Facebook.

Oculto en la Riviera Maya se encuentra un increíble tesoro sumergido en una especial reserva natural. Es mucho más que un simple destino turístico, y está localizado a tan solo cinco minutos del centro de Playa del Carmen. Sumergirse en estas cuevas es una experiencia de vida que guardará únicos recuerdos.

Protegida por su riqueza en flora y fauna, este río secreto es un espacio de reserva natural. Además, en el interior de las cavernas, existen impresionantes formaciones rocosas compuestas por miles de estalactitas y estalagmitas; fósiles marinos y singulares paredes.

La aventura está compuesta por múltiples laberintos de aguas claras, de diversas tonalidades y por momentos tranquilas; mientras que ahí mismo, se pueden disfrutar de sus blancas arenas, en un espacio silencioso, relajante y tranquilizante.

Playa del Carmen esconde un lugar muy especial digno de visitarse y preservarse. Imagen tomada de @GobPDC en X.

En esta maravilla natural se tiene la oportunidad de tocar el agua clara; al explorar la zona es posible encontrar fósiles marinos. Los lugareños protegen este espacio y piden a los visitantes respetar las reglas. Para poder disfrutar y nadar en las aguas subterráneas, es necesario ducharse para eliminar todo químico que pueda dañar el entorno natural.

Río secreto: 40 kilómetros de cuevas subterráneas

En la zona de Playa del Carmen hay aproximadamente 40 kilómetros de cuevas subterráneas que están semi inundadas por aguas claras. Solamente alrededor del 10 % de ellas se usan en cinco recorridos ecoturísticos conocidos como Río Secreto. Explorar este lugar requiere ir acompañado de un guía experto.

Playa del Carmen esconde en sus profundidades este Río Secreto.

El complejo es además, un espacio de investigación científica. Ahí, se han filmado también diversas series y documentales. Es un sitio relevante para la vida silvestre: habitan ahí varias especies endémicas que con el pasar de los años se han ido adaptando al ambiente subterráneo

Impresionante y frágil belleza

Para quienes habitan en la región, proteger este bello sitio significa cuidar y dar salud a nuestro planeta. Los visitantes pueden aprovechar para sensibilizarse respecto a lo frágil que es la vida, disfrutando responsablemente de ese especial entorno subterráneo.

Son varias las especies endémicas que ahí habitan; con el pasar del tiempo se han adaptado al medio subterráneo.

Si se ingresa, es importante vestir un traje de neopreno, chaleco salvavidas, lámpara, casco y zapatos especiales para agua. Llegar a Río Secreto requiere atravesar la densa selva; en el traslado es probable que se tenga la ocasión de observar algunos ejemplares de la fauna que ahí habita.

Sensibilizarse en la conservación de la naturaleza

Todos los recorridos que ahí se ofrecen son acompañados por expertos guías que, además de explicar sobre la geología y las formaciones rocosas, ilustran sobre el hábitat y la importancia de conservar estos sitios naturales. Este lugar ha recibido reconocimientos como uno de los mejores atractivos naturales del país.

Se invita que los visitantes exploren la zona con responsabilidad. Al conocer los secretos de estos acuíferos, se asume la responsabilidad de preservarlos para las generaciones actuales y futuras; asegurando que estos espacios se preserven y continúen ofreciendo momentos únicos.

Recomendaciones importantes

Para disfrutar al máximo la experiencia es importante vestir ropa ligera – preferentemente traje de baño – evitando el uso de prendas de mezclilla. Evita el uso de cremas o protectores solares, estos pueden contaminar el agua. Para explorar estas aguas subterráneas, se necesita portar con todo el equipo de seguridad.

Las aguas no son profundas, por lo que no es requisito saber nadar. Además por seguridad, es una regla portar en todo momento el chaleco salvavidas.

Se permite el acceso a grupos de máximo 10 personas por guía. Los recorridos tienen una duración máxima de entre 3 a 5 horas. En las instalaciones se cuentan con casilleros en donde se pueden guardar las pertenencias. Al final el paseo, se tiene la oportunidad de disfrutar de diversos platillos en la zona de restaurante.