¿Se congelará Norteamérica por el vórtice polar?

Sobre regiones polares, un enorme ciclón (con circulación en contra de las manecillas del reloj) que se extiende desde superficie hasta una altitud de 50 km en la estratósfera, encerrando el aire frío llamado vórtice polar. Este sistema meteorológico toma relevancia desde el otoño hasta principios de la primavera y su configuración puede tener cambios importantes, alterando las condiciones del tiempo.

Si el vórtice experimenta un fortalecimiento en su rotación, el frío ártico se queda encerrado en zonas polares, generando condiciones menos frías en países del hemisferio norte, pero cuando se debilita puede elongarse desplazando masas polares hacia varias regiones. Otro caso es un aumento súbito de la temperatura en la estratósfera, ocasionando que el vórtice se desorganice completamente extendiendo las condiciones invernales; esto último puede ocurrir en próximos días.

Calentamiento estratosférico repentino a la vista

La temperatura en la parte más alta de la tropósfera y especialmente en la estratósfera (a más de 40 km de altitud) se ha incrementado en los últimos días, pero de acuerdo con las previsiones, a finales de enero e inicios de febrero se prevé un repentino incremento térmico con anomalía que podría alcanzar +50 °C ocasionando que la configuración del vórtice polar se altere notablemente y el frío polar-ártico se desplace sobre varios países, principalmente de Asia y Europa.

En general, si el calentamiento estratosférico se posiciona sobre el Atlántico norte y el occidente de Europa, pueden extenderse los efectos del vórtice con importantes masas árticas hacia Norteamérica, pero si ocurre sobre Eurasia o el Pacífico norte, tienden a ser más limitados sus efectos hacia nuestra región. En esta ocasión el calentamiento podría aparecer entre Europa y Asia, ¿nos afectará? Conforme los modelos resuelvan correctamente su comportamiento actual, se estará advirtiendo

Es importante aclarar que esta situación es normal, un tanto común que puede darse en cualquier invierno y no tiene relación con el cambio climático o calentamiento global. Un evento importante ocurrió en febrero de 2018, cuando en Europa se generó la bestia del este debido a una inversión del viento, cambiando del oeste al este, arrastrando frío siberiano.

¿Llegarán sus efectos a México?

Una porción del vórtice se elongará hacia sectores de Canadá, Estados Unidos y México desde este fin de semana, empujando varias masas de aire muy frío. Todo hace indicar que a partir del 20 o 21 de enero aumentaría la incidencia de frentes fríos y descensos significativos de temperatura primero sobre estados del norte y parte del oriente, alcanzando probablemente la próxima semana el resto del país, excepto estados del Pacífico.

El fin de semana cruzaría el frente frío número 26, de lunes a martes el número 27 seguido de algunos reforzamientos, y a finales de mes es cuando podría darse la mayor intensidad de frío, viento, heladas, lluvias y eventualmente nevadas. Debido al plazo, aún no se puede asegurar intensidades y zonas con efectos, pero tentativamente los modelos coinciden en que puede darse algo relevante.