El Río Atoyac, un veneno silencioso: la contaminación masiva causa enfermedades en Puebla, México
Estudios recientes han demostrado la relación de la crisis de contaminación que sufre la región con el incremento de enfermedades crónicas en la población. Los padecimientos de cáncer van en incremento.
Una crisis importante está ocurriendo en el Altiplano central mexicano. Si bien, no todos están enterados de esta, no ha pasado desapercibida para los habitantes de la Cuenca del Alto Atoyac. ¿La causa? Una sola: la alta contaminación; que en la actualidad se extiende más y que está afectando el agua, el aire y el suelo de maneras inimaginables.
Siendo el hogar de más de 3 millones de personas y abarcando un total de 49 municipios (47 del estado de Tlaxcala y 22 en Puebla), se considera la cuarta área metropolitana más grande del país. Una región que prosperó hace no más de 50 años gracias a su riqueza en recursos naturales, hoy sufre las consecuencias de su sobreexplotación.
Su expansión urbana, la actividad agrícola desmedida y el un masivo desarrollo industrial sin regulaciones, ha deteriorado severamente los ecosistemas en cada una de sus esferas. Ya no sólo se trata de la contaminación del agua —como alguna vez se pensó— sino de efectos ambientales que han disparado de forma preocupante el padecimiento de enfermedades crónicas en la población.
Estudios y monitoreos por parte de organizaciones sociales y académicas están confirmando la emergencia sanitaria y ambiental que la región enfrenta, siendo la causa principal la descargas no tratadas por parte de miles de empresas que han prosperado a costa de la salud ambiental del medio y de todo el que lo habita.
Contaminación masiva: un veneno silencioso en el corazón de México
Casi siempre que pensamos en contaminación ambiental, viene a la mente la imagen de una fabrica rodeada de humo expulsado hacia la atmósfera. Pocas veces pensamos en las aguas negras de un río, suelos infértiles para la siembra o una sala de quimioterapia. La contaminación tiene más de una cara, y cientos de efectos que podrían costarnos la vida.
En el caso del Río Atoyac, la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), reconoció la problemática que sufre la región desde el año 2011, promoviendo nuevas metas de calidad y regulaciones para evitar más deterioro no sólo de este río, sino de todos los recursos hídricos de la región.
Lamentablemente, esto no fue suficiente para lidiar con la crisis ambiental que se venia gestando desde las últimas décadas del siglo pasado. Según los reportes del primer informe estratégico realizado por medio del CONACYT en colaboración con diversas entidades de investigación, el panorama está lejos de mejorar y los riesgos son cada día más preocupantes.
Cáncer, leucemia y nuevos efectos por la contaminación
Uno de los hallazgos más relevantes de los estudios realizados fue la relación del crecimiento exponencial de enfermedades crónicas en la población y de un apunte importante en los casos de cáncer, especialmente entre las generaciones más jóvenes.
Por medio de un estudio epidemiológico ambiental que incluyó la participación de 900 jóvenes, se encontró que al menos 19 % de los sujetos presentaba algún grado de disfunción renal. Además, se identificó que más del 50 % está expuesto constantemente a agentes altamente tóxicos como el arsénico, cobre y plomo.
Por otra parte, la región al sur de la cuenca está presentando una tasa más elevada de muertes por leucemia en niños y jóvenes entre 0 y 19 años. Mientras que los municipios de Tlaxcala cercanos a este sector, presentan la mayor tasa de incidencia por leucemias agudas.
Nuevas jornadas de saneamiento en Atoyac
En marzo del 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la jornada de saneamiento del río Atoyac, como una de las actividades correspondientes al Día Mundial del Agua. Durante este evento ella explicó los planes que el Gobierno de México tiene para lograr la limpieza de la cuenca hídrica en los próximos 3 años.
El plan será por medio de los gobiernos estatales de Tlaxcala y Puebla, en colaboración con la CONAGUA. El presupuesto para lograrlo contempla la inversión de 400 millones de pesos para este 2025, para comenzar con el mantenimiento al primer tramo del río, que abarca cerca de 35 kilómetros.
Además, la presidenta aseguró que por medio de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), harán una verificación exhaustiva de las fábricas que no estén cumpliendo las normativas, además de la modernización de las plantas de saneamiento cercanas.
Referencia de la noticia:
Primer informe estratégico. Cuenca del Alto Otoyac (Tlaxcala y Puebla); región de emergencia sanitaria y ambiental; problemática socioambiental y recomendaciones para su atención integral. Versión octubre 2023. CONAHCYT.