Chile: crean glaciares artificiales para combatir el cambio climático

En el marco de una megasequía en Chile buscan crear glaciares artificiales para guardar hielo en la cordillera y usarlo en primavera/verano. La idea es multiplicar estos glaciares a unos 50. Ya se está trabajando para poder entender su dinámica.

Glaciares en Chile
Los glaciares artificiales solo utilizarán la gravedad para mantenerse, por lo que serán totalmente sostenibles.

Una gran sequía impacta a Chile desde hace ya varios años, de la misma forma que sus efectos son sentidos al otro lado de la cordillera, especialmente sobre la Patagonia. El recurso del agua es cada vez más escaso, y muchas comunidades empiezan a sentir el peso de este fenómeno que parece lejos de revertirse.

Actualmente un grupo de expertos chilenos están intentando aprovechar los beneficios de los inviernos australes para congelar agua a manera de glaciares artificiales. El método es replicado de uno utilizado en India conocido como ice-estupas, y aplicado en el Himalaya. La idea central es formar pirámides de hielo con agua del invierno para preservarlas para la temporada de escasez. El proyecto apunta a crear 50 de estos glaciares.

El objetivo es ver si efectivamente este volumen de agua puede ser utilizado en primavera y verano. El parque hídrico se planea para la zona de el Cajón del Maipo en los Andes. El objetivo inicial es poder mantener hielo en estado sólido, utilizando la fuerza de gravedad, sin maquinaria para poder preservarlo. El proyecto sería sustentable y no aportaría contaminación adicional.

Razones del proyecto Nilus

El proyecto en el Cajón del Maipo lleva el nombre de Nilus. Según relata País Circular, el creador detrás de esta idea es el hindú Sonam Wangchuk que creyó posible congelar el agua que normalmente se pierde para hacerla disponible en épocas de mayor escasez del recurso. La zona elegida está dentro de un entorno cordillerano al sudeste de Santiago, y se pretende almacenar 100 millones de litros de agua el próximo año.

La forma cónica de estos glaciares ayudaría a preservarlos hasta la temporada en la que las temperaturas vayan subiendo. El grupo de trabajo lo constituyen glaciólogos, geólogos, ingenieros hidráulicos e informáticos que adaptaron el método usado en India para Chile. Si bien las primeras pruebas se harían en el Cajón del Maipo, se cree que será fácilmente escalable para lograr la creación de los 50 glaciares propuestos.

En diálogo con País Circular, el director del proyecto, Enrique Gellona indica que “en la India esta metodología se usa para canalizar agua durante los meses de invierno y a través de diferencias de presión por altura se ponen aguas arriba y generan hielo con el fin de guardarla y disponerla en épocas estivales”. El solo uso de la gravedad es un gran aporte al medio ambiente, ya que no necesita de ninguna otra forma de energía externa que implique contaminación.

Poder llevarlo a otros lugares del país

Se utilizarán posibilidades que otorga la inteligencia artificial, ya que el parque hídrico de 50 ice-stupas de entre 6 a 7 metros de altura será gestionado y monitoreado con un modelo que usa esta tecnología. La idea es proyectar diferentes escenarios y ver luego cuáles son las mejores condiciones para adaptarlos a otros lugares.

Se van a utilizar fotografías digitales y estaciones de monitoreo para entender cuánto demora el glaciar artificial en derretirse y medir cuál es el impacto en la comunidad. Lo cierto es que la posibilidad de que la sequía persista en el tiempo es alta y las soluciones de este tipo serían muy necesarias. Las formas cónicas de los ice-stupas permiten que el hielo se derrita de manera mucho más lenta, a diferencia de la nieve cordillerana que dura muy poco en ese estado.

En Chile hoy hay hoy 24,000 glaciares, de los cuales solo 3 siguen creciendo año a año. El proyecto intenta copiar la dinámica de los glaciares y brindar agua en primer lugar a comunidades cercanas muy afectadas, permitiendo el crecimiento de gigantescas masas de hielo, capaces de imitar la función de los glaciares. También analizarán si esta técnica es viable para ser aplicada más al norte, en la región de Atacama.