¿En verdad debemos esperar 300 años otra ver otro eclipse en México? Qué nos dice el ciclo de Saros

El próximo eclipse que pase por territorio mexicano será dentro de 28 años. No así con el próximo eclipse que recorra el mismo camino que el Eclipse Total de este 8 de abril.

Imagen ilustrativa del Ciclo de Saros.

Estamos a menos de 24 horas de que ocurra un eclipse total de Sol que, por lo menos en México, llevamos casi 33 años esperando, muchos de los titulares que inundan la web, repiten una idea equivocada acerca de cuándo se volverá a repetir un fenómeno similar.

Algunos dicen que dentro de más de 300 años, otros que en 28, ¿clickbait o fake news? Lo cierto es que ambos titulares tienen razón, sólo haría falta especificar un detalle muy importante: la zona por la cual va a pasar ese “próximo” eclipse.

Si nos referimos a exactamente la misma zona en la que viajará la umbra, entonces sí, tendremos que esperar hasta el 25 de febrero del año 2343, poco más de 300 años. Sin embargo, si nos referimos a cuándo será el próximo eclipse en territorio mexicano, para eso sólo hace falta esperar 28 años, el 30 de marzo de 2052.

Para los espectadores humanos, ya sean salvajes o civilizados, científicos o profanos, un eclipse total de Sol es sumamente impresionante y lleno de maravillas; y el asombro por ello se acentúa al tener lugar en la hora, minuto y segundo exactos en que los astrónomos dicen que sucederá. Pero, ¿cómo se alcanza tal perfección?

Esquema de un ciclo de Saros y su movimiento relativo. Crédito: NASA

El ciclo de Saros

Lo podemos imaginar como una coreografía cósmica que involucra a la Luna, la Tierra y el Sol. Imagina que estos tres astros se toman de la mano y danzan alrededor de sus órbitas. Cada vez que completan una vuelta, ocurre un eclipse. Pero no cualquier eclipse, ¡uno con la misma trayectoria!

El ciclo de Saros (o simplemente “saros”), es un período de 223 meses (o lunas) sinódicos, dura aproximadamente 18 años, 11 días y 8 horas. Durante este lapso, la Luna y la Tierra regresan aproximadamente a la misma posición en sus órbitas. Por lo que se puede repetir un eclipse con las mismas características del ciclo anterior.

Una luna sinódica es el tiempo que tarda la Luna en volver a la misma fase (por ejemplo, de Luna nueva a Luna nueva). Este ciclo nos permite predecir futuros eclipses. Después de un saros, los astros se alinean de manera similar, y podemos esperar que ocurra un eclipse con una trayectoria parecida.

Cada ciclo de Saros contiene 84 eclipses: 42 solares y 42 lunares. Estos eclipses se repiten en patrones similares debido a las posiciones relativas de los astros. Por ejemplo, si hubo un eclipse solar en un saros específico, el próximo con la misma serie ocurrirá después de 18 años y 11 días.

Historia del ciclo de saros

La palabra Saros deriva del término babilónico "sar", que es un intervalo de 3,600 años. Claudio Ptolomeo, en su obra "Almagesto", registró observaciones de eclipses lunares totales realizadas por los babilonios en el año 721 a.C. El astrónomo caldeo Beroso podría haber sido el descubridor original de este ciclo.

Más recientemente, el sistema de numeración utilizado para la serie Saros fue introducido por el astrónomo holandés G. van den Bergh en su libro Periodicidad y variación de los eclipses solares (y lunares) en 1955.

Ciclo de Saros. Crédito: NASA

Colocó los 8,000 eclipses solares del Canon der Finsternisse (1887) de von Oppolzer en una gran matriz bidimensional. Cada serie de Saros se organizó como una columna separada con los eclipses en orden cronológico.

Luego, las columnas de la serie Saros se escalonaron de modo que el intervalo entre dos eclipses cualesquiera en columnas adyacentes fuera de 10,571.95 días (= 29 años -20 días). Con esto se forman series que ayudan a predecir la cadencia y zona donde ocurrirán los próximos eclipses.

Predicciones exitosas

Dado que la duración de cada serie varía hasta varios cientos de años y la numeración sigue aproximadamente el orden en que cada serie alcanza su punto máximo, puede ocurrir que el primer eclipse de una serie que alcanza su punto máximo más tarde puede en realidad preceder al primer eclipse de una serie que alcanza su punto máximo antes.

El número 223 es crucial. Es un múltiplo tanto del mes sinódico como del mes draconítico.

  • El mes sinódico (de Luna nueva a Luna nueva) dura aproximadamente 29.5 días.
  • El mes draconítico (tiempo entre dos pasos sucesivos de la Luna por su nodo orbital) es de aproximadamente 27.2 días.
  • El saros sincroniza estas dos duraciones, explicando la alineación de los astros.

Es por esto que para que un eclipse pase exactamente por la misma zona se debe esperar tanto, no así por un mismo país. Si tu país tiene una gran extensión territorial, hay más probabilidades de que el tiempo sea menor. En México, tendremos que esperar 28 años solamente, aunque no tendrá la misma trayectoria, pues pertenece a oto ciclo de Saros.

En resumen, el ciclo de Saros es como una partitura celestial que nos permite anticipar los movimientos de los astros y maravillarnos con los misterios del universo. Así que, la próxima vez que observes un eclipse, recuerda que estás presenciando una danza que ha sido coreografiada durante siglos.