Ola de Calor finaliza y la temporada de lluvias y ciclones tropicales se establecerá en México a partir de este día
Ola de Calor está por finalizar para dar paso a la temporada de lluvias a finales de esta semana. Debemos extremar precauciones por temperaturas de más de 40° y lluvias abundantes con inundaciones.
La circulación atmosférica está por cambiar hacia condiciones inestables, el anticiclón que dominado perderá intensidad y organización, dejando el paso libre a la humedad tropical con el posible desarrollo del primer sistema ciclónico de la temporada y los últimos frentes fríos que estarían produciendo lluvias.
Llegará la humedad tropical
Desde la semana pasada, el anticiclón fue el protagonista en México, ocasionando que el calor incrementara su intensidad, pero nada que ver al 2023 y 2024 cuándo casi toda la primavera, desde marzo hasta junio, incluso, se presentaron grandes olas de calor y escasez de precipitaciones. A mitad de esta semana se debilitará el anticiclón.
Podríamos decir que, esta primavera 2025 ha sido mucho más llevadera gracias a La Niña y fase Neutra. La actual Ola de Calor prácticamente ha sido la única esta temporada con temperaturas elevadas relevantes, pero eso está por finalizar; dicho anticiclón posicionado sobre el Golfo de México, perderá mucha intensidad y lucirá más disperso con menor influencia en el país.
Con el anticiclón más débil, una vaguada polar logrará extenderse al sur de EEUU, impulsando a un nuevo frente frío qué logrará llegar al norte del territorio mexicano de miércoles hacia el fin de semana, combinándose con divergencia en altura, calor y el relieve para generar lluvias abundantes, poniéndole fin a la Ola de Calor.
Y así continuaría los últimos días de mayo: anticiclón débil y vaguadas polares, pero se sumaría una posible perturbación tropical con potencial de ser ciclón distante al sur de las costas de México la próxima semana. De esto dependerá qué tantas lluvias se producen la semana entrante, pero todo indica que serán abundantes y con frescor en gran parte del país.
¿Dónde se esperan lluvias y tormentas?
Resaltarán las regiones del noreste, centro, occidente, sur y oriente desde mañana martes, pero siendo más significativo desde el miércoles 21 de mayo sobre la mitad centro-sur del país; la próxima semana podría extenderse más notable en el norte y noreste. En el sureste serán pocas las lluvias, condicionales a eventos locales.
Los mayores acumulados dentro de los próximos 7-10 días se prevén entre Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, San Luis Potosí, Guanajuato, Querétaro, Michoacán, oriente de Jalisco, Hidalgo, Estado de México, Guerrero, Morelos, Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Oaxaca, Veracruz y Chiapas
Se estiman de 30-50 mm y puntuales 70-150 mm, pero son probables máximos de 200-400 mm en montañas del centro-sur, como es el Eje Neovolcánico desde Michoacán hasta Puebla y los estados costeros de Guerrero a Chiapas, aumentando probabilidad de inundaciones, deslizamientos y crecidas de ríos/arroyos.
Otras zonas más secas
En el sureste y el norte, sobre estados de Chihuahua, Durango, Zacatecas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, las lluvias serán mínimas y aisladas estimándose de 5-10 mm con puntuales de 20-30 mm, principalmente en península de Yucatán; sería hasta finales de mes cuando aumentarían un poco más, siendo más notable en junio.
El noroeste y Pacífico hasta costas de Nayarit-Jalisco, las lluvias seguirán siendo nulas, manteniéndose y aumentando en sectores la sequía que aqueja la zona; esto cambiaría en junio con el establecimiento del Monzón Mexicano que puede favorecer lluvias abundantes y muy benéficas.
Contrastes entre calor y frescor
Las temperaturas estarán en función con el comportamiento y presencia de las lluvias; así, el noreste, centro, sur, oriente y parte del occidente, es donde se espera mayores efectos de descenso térmicos avanzadas las tardes y por las noches, incluso al mediodía se espera mucha menor intensidad del calor.
Por supuesto, el Altiplano desde el Bajío y especialmente en el Valle de México, es donde el ambiente se refrescaría más notablemente con máximas de 15 a 25 °C y de 5 a 15 °C en montañas, donde es probable nieve en cimas de volcanes y con valores menores después de las lluvias.
En contraste, todos los estados costeros seguirán con calores de 35 a 40°C, aunque en el Golfo de México es donde las lluvias ayudarían, pero en el Pacífico y el noroeste en general, el calor aumentará con máximas que pueden superar los 40 °C, que va siendo algo típico de la época, donde el verano es lo más caluroso.