¿Podrían ser una realidad en el futuro a corto plazo los “confinamientos climáticos”?

Las poblaciones de varios países asiáticos están confinadas, las escuelas cerradas y se pide a los residentes que permanezcan encerrados en sus hogares. La causa, un ambiente muy caliente. ¿Se convertirán los “confinamientos climáticos” en la norma?

Ola de calor Asia confinamiento climático
Las poblaciones de varios países asiáticos se están asfixiando ante temperaturas superiores a los 50 °C.

La palabra encierro siempre deja un mal recuerdo. La de 2020, cuando casi todo el planeta se vio obligado a permanecer encerrado en casa para evitar la propagación de un virus. Ninguna enfermedad transmisible en relación con los “confinamientos climáticos”. Como su nombre indica, este tipo de confinamiento está ligado al mal tiempo y el clima extremo y, más concretamente, al calor extremo.

Teletrabajo obligatorio, escuelas cerradas, aunque el virus Covid-19 no ha desaparecido, la vida ha podido volver a la normalidad. Ahora es el tiempo severo y el clima extremo, los que amenazan nuestra libertad de salir. El “confinamiento climático” ya se aplica en varios países asiáticos, donde desde hace varias semanas azota una ola de calor extremo.

Este nuevo concepto de "confinamiento climático" no existe (todavía) oficialmente, pero muchos medios de comunicación están empezando a utilizar el término para designar las medidas adoptadas por las autoridades en caso de calor muy intenso. El gobierno de Tailandia ha pedido a las escuelas que favorezcan la educación a distancia.

Y se invitó a los residentes a quedarse en casa debido a un nivel de calor "considerado extremadamente peligroso", en particular el miércoles 24 de abril. Las temperaturas en este país asiático y en los países fronterizos han superado con frecuencia los 50 °C en los últimos días.

Tailandia no es el único país donde se ha implementado un "bloqueo climático": a los niños que viven en Filipinas y Bangladesh se les pide que se queden en casa debido a las temperaturas sofocantes y las escuelas están cerradas. Sin duda, abril y mayo son los meses más calurosos del año para los países del sudeste asiático.

Pero el calentamiento global y el fenómeno de El Niño están provocando un aumento de las temperaturas, batiendo muchos récords. Sobre todo porque el continente asiático se está calentando más rápido que la media mundial, señala la Organización Meteorológica Mundial. Los episodios de olas de calor en estos países son “cada vez más graves”.

Para muchos científicos, el término "confinamiento climático" no se aplica en este caso. Porque estas medidas son “reglas de sentido común”, revela Françoise Vimeux, climatóloga del Instituto de Investigación para el Desarrollo. De hecho, estas medidas, que pueden parecer estrictas, permiten limitar el número de muertes relacionadas con el calor extremo.

En Francia, el gobierno quiere evitar a toda costa revivir las dramáticas consecuencias del abrasador verano de 2023. Porque "las autoridades tienen la obligación de albergar a la población" en caso de peligro, explica Marie-Antoinette Mélierès, física y climatóloga. Lo que están haciendo actualmente algunos países asiáticos que enfrentan este problema de calor mortal.

"No vamos a poner a todos a cubierto como durante el Covid-19, pero tendremos que dejar claro que tendremos que reorganizar el trabajo en determinadas zonas para evitar muertes, como durante la construcción de estadios de fútbol en Qatar”, ella agrega.