El caso sin resolver de la Estrella de Belén: ¿alineación planetaria, supernova o cometa? La ciencia presenta evidencia

La Estrella de Belén es un enigma que combina teología y ciencia. Tres fenómenos celestiales y una lluvia de meteoros compiten por explicar el faro que guio a los Reyes Magos.

Los reyes magos eran unas sabios que estudiaban los astros, según Mateo 2:1-2.

El relato en el Evangelio según San Mateo, describe un fenómeno celestial que guió a unos “sabios” desde Oriente hasta Belén, simbolizando la llegada del Mesías. Esta narrativa teológica ha impulsado siglos de investigación para descubrir qué evento astronómico pudo inspirarla.

A lo largo del tiempo, la ciencia ha propuesto tres principales contendientes para la Estrella: conjunciones planetarias, novas o supernovas y cometas. Aunque los astrónomos han dedicado esfuerzos persistentes a estas búsquedas, ninguna explicación naturalista ha resuelto el enigma de manera concluyente.

El problema central para la astronomía es que la descripción bíblica del movimiento de la Estrella es físicamente imposible para cualquier objeto celeste observable. Se dice que la estrella guió a los Magos hacia el sur desde Jerusalén y que se detuvo y flotó sobre una vivienda.

La idea de que la Estrella se detuviera y actuara como una "antigua unidad GPS" está fuera del ámbito de la astrofísica y la investigación científica. Por ello, muchos académicos y teólogos sugieren que el fenómeno debe entenderse como un evento milagroso o un presagio divino, no natural.

Triple conjunción entre Júpiter, Venus y Saturno el1 de mayo del año 5 antes de nuestra era. Crédito: Zeus Valtierra / Stellarium.

En la antigüedad, la diferencia entre astronomía y astrología era insignificante. Los Reyes Magos habrían interpretado el cielo de maneras culturalmente específicas, incluyendo factores irreconocibles hoy, como patrones climáticos locales.

Los candidatos naturales

La hipótesis más sólida históricamente es la triple conjunción de Júpiter y Saturno en Piscis, ocurrida en el 5 a.C., reconstruida por Kepler. Júpiter simbolizaba la realeza, Saturno a Israel y Piscis a Judea en la astrología babilónica, lo cual daba a la conjunción un potente mensaje astrológico.

Sin embargo, aunque esta conjunción es verificable y culturalmente significativa, su carácter predecible contrasta con el tono extraordinario del relato bíblico. Además, al no ofrecer una trayectoria clara de “guía”, no satisface todos los detalles narrativos del Evangelio de Mateo.

Restos de RCW 86, el ejemplo más antiguo documentado de supernova. Crédito: NASA.

Otra teoría recurrente es una nova o "estrella huésped" registrada en los anales chinos alrededor del 5 a.C., caracterizada por un aumento súbito de brillo que se mantiene visible semanas. Si bien encaja con un evento inesperado, aparecería como un punto brillante fijo, dificultando la interpretación de una dirección específica de "guía".

Por su parte, los cometas, satisfacen la idea de un movimiento notable en el cielo. No obstante, en la mayoría de las culturas antiguas, los cometas eran considerados presagios negativos, lo que complica asociarlos con el nacimiento de un rey.

Lluvia de meteoros Eta-Acuáridas

Una perspectiva intrigante propone que la Estrella pudo ser la lluvia de meteoros Eta Acuáridas, producida por los escombros del famoso Cometa Halley. Este evento celestial ocurre anualmente a principios de mayo, alcanzando su pico alrededor del 5 o 6 de ese mes.

La teoría sugiere que, observada desde un punto de vista distante, esta lluvia de meteoros podría aparecer como una única fuente de luz concentrada y en movimiento. Los Reyes Magos, al no tener un conocimiento astronómico generalizado, pudieron haberlo malinterpretado como un evento único y extraordinario.

La rapidez de los meteoros Eta Acuáridas puede resultar en "trenes" brillantes y estelas persistentes, creando una fuente de luz más notable que una lluvia típica. Además, algunos académicos especulan que el nacimiento de Jesús ocurrió a principios de mayo, sincronizando con este fenómeno.

La constelación de Acuario, de donde parecen originarse las Eta Acuáridas, agrega significado astrológico a la hipótesis. En la astrología, esta era se asocia con un tiempo de esperanza, innovación y despertar espiritual, resonando profundamente con el mensaje de Jesucristo.

Interpretación y significado religioso

Más allá de la ciencia, existe un profundo significado teológico, simbolizando la guía divina y la universalidad del plan de salvación, pues se manifestó a los Reyes Magos, quienes eran gentiles y representa un nuevo amanecer de esperanza y luz.

Los astrónomos a menudo fallan al ignorar la erudición bíblica, buscando una explicación naturalista sin leer el Evangelio literalmente en su idioma original. Las interpretaciones modernas del lenguaje, como la de Michael Molnar, han sido criticadas por no dominar las reglas gramaticales básicas del griego.

La erudición moderna tiende a comprender mejor la historia a través del análisis literario, comparándola con profecías antiguas, como la de Números 24:17. La Estrella, en este contexto, funciona como un presagio divino o un "milagro" que no requiere validación científica.

En última instancia, el intento de demostrar que una parte de la Biblia es científicamente verificable, se basa en la ignorancia del contexto bíblico. La historia es, ante todo, una poderosa narrativa con un significado profundo y que cada quien puede interpretar de acuerdo con sus creencias...