De papas descartadas a skincare: investigadores rescatan residuos agrícolas para crear cosméticos
Esta investigación es pionera y sienta las bases para la innovación futura y para el desarrollo de productos naturales sostenibles y ecológicos.

Científicos de la Universidad de Aberdeen en Escocia forman participa con un equipo que busca convertir los desechos de papa en compuestos que puedan utilizarse para productos cosméticos, farmacéuticos y nutracéuticos. La industria escocesa de la patata de semilla, con un valor de 24.2 millones de libras, genera más de 51 toneladas de tubérculos de patata al año.
Como parte de una práctica esencial de gestión del cultivo para frenar el crecimiento de los tubérculos y garantizar su calidad, conservación y resistencia a las enfermedades, los tubérculos se desechan tradicionalmente tras la cosecha.
Pero ahora hay personas interesadas en extraer beneficio de las papas. El proyecto pretende extraer solanesol de los productos desechados, un compuesto vital para producir coenzima Q10 y vitamina K2, ingredientes clave en productos cosméticos, nutracéuticos y farmacéuticos, por sus efectos antioxidante.
Actualmente, la demanda de solanesol, que es un alcohol terpénico natural de cadena larga, presente principalmente en plantas de la familia Solanaceae como el tabaco, la papa y el tomate.

Se ha disparado de 4 mil toneladas a principios de la década de 2000 a 66 mil toneladas para 2022. Al aprovechar este potencial, el proyecto optimizará el uso de la biomasa de la patata, reducirá los residuos agrícolas y creará nuevas oportunidades económicas para los agricultores escoceses y los miembros de las cooperativas.
Con 12 mil 800 hectáreas de papas de siembra cultivadas en Escocia, la industria podría producir hasta 120 toneladas de solanesol al año, impulsando la innovación en la economía circular y fortaleciendo la resiliencia rural.
Pionera en el mundo
Sin duda esta investigación es pionera y sienta las bases para la innovación futura, garantizando que el Reino Unido esté a la vanguardia del desarrollo de productos naturales sostenibles y ecológicos para el sector cosmecéutico.
Al demostrar cómo los subproductos agrícolas pueden transformarse en compuestos de alto valor, el proyecto sienta las bases para la investigación y comercialización posteriores que impulsarán la innovación, reducirán el impacto ambiental y garantizarán una ventaja competitiva para la ciencia y la industria del Reino Unido.
Explorar la calidad y el rendimiento del solanesol extraído de hojas de papa de origen local y evaluar sus posibles aplicaciones en las industrias cosmecéuticas y relacionadas representa un área de investigación apasionante e impactante.
Pero esto no es novedad, ya que la papa además de sabrosa y complemento para los platillos, la cáscara de papa, es un residuo comúnmente desechado en la cocina, pero ha demostrado tener propiedades beneficiosas para la piel respaldadas por investigaciones científicas.
Según estudios publicados en la revista especializada Journal of Agricultural and Food Chemistry, este subproducto contiene una mayor cantidad de antioxidantes que la pulpa de la papa, lo que lo convierte en un recurso natural valioso para el cuidado cutáneo.
Estos antioxidantes, como los fenólicos como el ácido clorogénico, el ácido cafeico y los flavonoides, ayudan a combatir el estrés oxidativo, un factor clave en el envejecimiento prematuro de la piel, caracterizado por la aparición de arrugas, flacidez y manchas. Otro beneficio de la cáscara de papa es su capacidad despigmentante