Tiempo invernal obstaculizan tareas de rescate en Oriente Medio

Adicional a la ya de por sí complicada situación con los temblores, los rescatistas se enfrenten a tiempo invernal, buscando entre los escombros rescatar sobrevivientes y a personas fallecidas.

En medio de temperaturas congelantes, se llevan a cabo las tareas de rescate. Fotografía: bbc.com

En su oportunidad, te hemos informado sobre la complicada situación que se vive en Oriente Medio, particularmente en las naciones de Siria y Turquía; territorios en donde, un fuerte sismo de magnitud 7.8 sacudió. Se han contabilizado más de 11 000 heridos, así como el lamentable fallecimiento de por lo menos 2 500 personas. Aunado a ello, condiciones invernales se enfrentan en la región.

La presencia de nieve, lluvia y heladas están impidiendo que las tareas de búsqueda y rescate se lleven a cabo con la prontitud requerida ante la catástrofe telúrica. A decir de los medios de comunicación de la región, y conforme ésta se va transmitiendo, se sabe que son más de 3,000 las personas fallecidas. Se cuentan por miles también, las personas heridas.

A decir del vicepresidente de Turquía, Fuat Oktay, los servidores públicos de esa nación, se encontraban luchando con las condiciones meteorológicas extremadamente severas. “Estamos tratando de llegar a la región lo más rápido posible”, citó Oktay a los medios. Éstos, incluyeron que las condiciones invernales hacen que la situación sobre el terreno sea “muy difícil”.

“En todas partes, se encuentra lluvia o nieve, además hace mucho frío. Las condiciones meteorológicas lo están haciendo muy difícil para los rescatistas y los civiles. Parece ser el mayor desafío para todos”. Estas declaraciones fueron hechas por un corresponsal de una agencia de noticias internacional. En medios televisivos, apenas se alcanza a dimensionar la grave situación que se vive.

El tiempo complica el rescate

Un corresponsal de una agencia de noticias para una cadena televisión, que se encontraba en la ciudad turca de Gaziantep, informó que “muchas personas estaban de pie, afuera en el frío, desde que ocurrió el terremoto, hasta que algunas de las mezquitas abrieron sus puertas, permitiendo que la gente se refugiara de las heladas temperaturas”.

En este mismo sentido, se dijo también que la gente tiene miedo de acercarse a los edificios, por el temor de que sus estructuras estén débiles. Además, incluyendo el factor de la gran cantidad de réplicas que se han presentado. “Se pueden ver calles enteras llenas de autos, y personas sentadas dentro de ellos”.

Es como una pesadilla

Un ciudadano de la región dijo que: “es como una pesadilla y deseamos salir pronto de ella; es indescriptible”. Las autoridades informaron, que es probable que aumente el número de muertos; mientras tanto, expertos advirtieron que las réplicas podrían continuar durante los próximos días o semanas.

Los rescatistas deben excavar entre los escombros, a valores de temperatura que apenas superan los 0 °C como máxima este lunes 6 de febrero. Se dijo que, existe gran preocupación entre los administradores de emergencias, pues ante el pronóstico, las temperaturas pudieran descender tanto que los sobrevivientes pudieran padecer de hipotermia o morir por congelación.

Miles de personas fallecidas

El enorme terremoto de magnitud 7.8 sacudió gran parte del centro de Turquía y el noroeste de Siria. Este, fue seguido por réplicas de 6.7 y 7.5 en cuestión de horas. Trascendió, que la región siguió siendo sacudida por fuertes réplicas. Innumerable cantidad de edificios han colapsado, ocasionando la muerte de miles de personas, y atrapando a otras tantas más.

La región, ha sido devastada por tres grandes terremotos esta semana, y ahora se enfrenta a la severa eventualidad de luchar contra la nieve, el frío y la lluvia en medio de la actividad de buscar entre los escombros a personas heridas. Por otra parte, también se lleva a cabo la importante tarea de buscar refugio a miles de habitantes que ahora se encuentran sin hogar.

Tres mil equipos de rescate

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, informó que en la nación se tomaron medidas inmediatas, poco después de que los mortales terremotos azotaran en la región, movilizando a las fuerzas armadas y otras instituciones para brindar apoyo en las áreas más dañadas. “Deseo la misericordia de Alá sobre nuestros ciudadanos que perdieron la vida en este gran desastre, y una pronta recuperación a los heridos”, dijo.

De acuerdo a agencias de noticias internacionales, solamente en Turquía más de 3 700 edificios fueron destruidos por el movimiento telúrico. Dentro de estos, se incluyen centros de salud, que resultaron con daños. Trascendió que, de estos, al menos un colapsó en la ciudad de Iskenderun. Grave es la situación que se está viviendo en Oriente Medio.