Por esta razón el mes de mayo se llama así

¿Por qué se llama así el mes de mayo? Una inmersión en el pasado para descubrir la etimología del nombre que desde hace milenios indica el quinto mes del año.

mayo amapolas
Un prado lleno de amapolas en flor en la campiña italiana. Paisaje típico del mes de mayo en Italia.

Acabamos de entrar en el mes de mayo, el quinto del año en el calendario gregoriano, un mes de plena primavera en el que podremos vivir una gran variedad de situaciones meteorológicas en todo el mundo y también podremos experimentar los primeros gustos del verano en el hemisferio norte. Aunque en este 2024 las temperaturas y el mal tiempo nos hagan retroceder unas semanas.

A continuación, te invitamos a Descubrir la etimología y que hay detrás del origen del nombre de mayo.

¿Por qué mayo se llama así?

Como ocurre con muchos otros nombres y palabras que utilizamos en nuestro día a día, el nombre del mes de mayo también tiene sus raíces en el pasado. Existen varias hipótesis sobre la etimología del nombre "mayo". Lo que indica la Academia de la Crusca es que este nombre deriva del latín Maius (mensis), a su vez de etimología incierta, probablemente de Maia, nombre de una antigua divinidad itálica de la tierra y de la cosecha, y madre de Mercurio.

Mayo es el quinto mes del año en el calendario gregoriano y es el tercer mes de primavera después de marzo y abril. Dura 31 días.

Según el Diccionario Etimológico de Pianigiani este nombre hace referencia a la 'gran diosa', la gran madre refiriéndose a la tierra, a las cosechas, y también madre de Mercurio. Al fin y al cabo, mayo es un mes crucial en la agricultura, porque se acerca la cosecha de cereales y maduran muchos frutos que luego se recogerán en los meses de verano.

Una curiosidad: mayo antiguamente era el tercer mes del año

En la antigua Roma, hasta el año 46 a.C., se utilizaba un calendario diferente al que utilizamos hoy. El calendario romano se basaba principalmente en ciclos lunares, duraba sólo diez meses y comenzaba el año el 1 de marzo, finalizando en diciembre. Por tanto, mayo fue el tercer mes.

Los signos de aquel antiguo calendario todavía son visibles hoy en los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre, que en aquella época eran respectivamente el séptimo, octavo, noveno y décimo mes del año. Julio y agosto fueron llamados "quintilis" (quinto mes) y "sextilis" (sexto mes), y luego fueron dedicados a Julio César y Augusto tras las grandes reformas posteriores.

El nombre de marzo proviene en cambio del dios romano Marte, mientras que sobre abril existen más dudas y diferentes hipótesis, aunque incluso en este caso las referencias a la primavera y al despertar de la naturaleza son evidentes.

Reforma del calendario Romano en año 46 a. C.
Fue impulsada por Julio César, introdujo el "calendario juliano", en el que, como ocurre hoy, el año comenzaba en enero y mayo pasaba a ser el quinto mes.

En 1582, la reforma gregoriana del calendario introdujo nuevos cambios, sin alterar el orden de los meses, y mayo siguió siendo el quinto.