El próximo 'ciclo solar' puede ser el más intenso jamás registrado

Los científicos estudiaron 270 años de datos sobre los ciclos de las manchas solares, identificando patrones de comportamiento del sol. Los resultados sugieren que el próximo puede ser el más intenso jamás registrado.

Próximo ciclo solar puede ser más intenso 2021
Astrónomos y físicos estudiaron 270 años de datos de ciclos de manchas solares, dedujeron que el próximo puede ser más intenso. Imagen: NASA

Las manchas solares son pequeños “oscurecimientos” en la superficie del sol, ocurren cuando un campo magnético intenso disminuye tanto el flujo de energía que emana del interior del sol como la temperatura de la región. Es por eso que las manchas solares no son realmente negras u oscuras, solo son menos brillantes; las regiones a su alrededor son tan brillantes que, en contraste, terminan luciendo oscuras.

El caso es que las manchas solares están directamente relacionadas con la mayoría de las erupciones solares y eyecciones de masa del sol, que provocan problemas en los satélites de telecomunicaciones, líneas de transmisión e incluso interrupción del suministro eléctrico, además de llegar a los astronautas con radiaciones nocivas al Salud.

Las erupciones solares pueden causar grandes problemas en la red de telecomunicaciones, la transmisión de energía y en la salud de astronautas

Cuanto mayor sea el número de manchas solares, mayor será el número de erupciones solares y mayor será la posibilidad de que ocurran problemas importantes como resultado de esta alta actividad solar. Por tanto, ya han motivado miles de investigaciones desde el descubrimiento del ciclo solar, hace 175 años, que es un período de aproximadamente 11 años, donde siempre hay aumento y luego disminución en cantidad de manchas observadas en la superficie del Sol.

Desde entonces, el énfasis de la investigación ha sido comprender la física de la formación de estas manchas, además de intentar predecir las propiedades de los próximos ciclos solares utilizando estadísticas o métodos físicos. A medida que el ciclo de las manchas solares alcanzó una mayor importancia social, se convocaron paneles de toda la comunidad científica y se les asignó la tarea de generar opiniones de consenso sobre el próximo ciclo de estas.

Hoy en día, un gran número de técnicas son capaces de explicar los tiempos, la forma geométrica y la amplitud de los ciclos de las manchas solares. Sin embargo, predecir estas características por adelantado sigue siendo un problema abierto.

Sin embargo, un estudio publicado el mes pasado demostró ser una de las alternativas más sólidas jamás concebidas. El investigador Scott McIntosh y sus colegas utilizaron un método matemático llamado transformadas de Hilbert para profundizar en la relación entre el ciclo magnético del Sol y la amplitud del ciclo de las manchas solares, utilizando 270 años de datos recopilados.

Ciclos solares registrados
En el gráfico con los últimos ciclos solares, el pronóstico de consenso de la comunidad científica está representado por el marcador verde, mientras que el pronóstico sugerido en este estudio es el marcador violeta, que es más intenso. Gráfico: McIntosh et al., 2020

Los investigadores identificaron lo que llamaron eventos de terminación, que pueden estar relacionados con varios fenómenos, entre ellos, el final del ciclo de manchas solares anterior, la intensificación del ciclo actual y el final de los ciclos de actividad magnética. Usando estos marcadores, pudieron extraer una relación entre el número de eventos y el ciclo solar que permite un pronóstico con un 68% de confiabilidad.

Con esto, los investigadores dedujeron que el próximo ciclo solar (que comienza ahora) tendrá una magnitud muy alta, y rivalizará con el más grande registrado y pudiéndose convertir en el más intenso de la historia. Resultado diferente al consenso de la comunidad científica actual, que prevé un ciclo poco activo y similar al anterior.

Los resultados de la investigación apuntan a que el ciclo solar 25, que está comenzando, será uno de los más intensos jamás registrados, lo que va en contra del consenso de la comunidad científica

El resultado es vital para entender cómo se comportará el Sol durante los próximos 11 años -hasta aproximadamente el 2031- y permitir que la sociedad tome acciones efectivas para evitar problemas en la red de comunicaciones y transmisión de energía, además de garantizar la seguridad de los próximos astronautas.