2020 otro año incendiario y devastador para el Amazonas en Brasil

En los últimos 10 años el 2020 es el que mayor número de incendios forestales ha registrado en Brasil. Es claro que la destrucción de los bosques se incremento desde que el presidente de derecha Jair Bolsonaro asumió el cargo en 2019.

Incendios Amazonas 2020
La agencia espacial brasileña también opera otro programa de monitoreo basado en satélites conocido como PRODES que analiza la deforestación una vez al año.

El pulmón verde más grande del mundo continúa consumiéndose por las llamaradas de los incendios forestales de gran magnitud y la deforestación, habitantes de la región comentan que estos en su mayoría suelen ser ocasionados intencionalmente para obtener terrenos de manera ilegal y estos puedan ser ocupado para sembrar soja o soya que será exportada a China, entre algunos otros cultivos.

Mientras que presidente Jair Bolsonaro dice que quiere desarrollar la región, los defensores del medio ambiente comentan que sus políticas alientan a los madereros, mineros y agricultores a destruir la selva de forma acelerada.

Para imaginar la gravedad del daño a la selva brasileña, un foco incendiario destruyó el equivalente a más de dos campos de fútbol en tan solo un minuto, esto durante un incendio registrado en octubre del 2020. Otro año devastador para un recurso natural considerado vital para frenar los efectos nocivos del cambio climático, según datos de ambientalistas y el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE, por sus siglas en portugués).

El INPE identificó 8.426 kilómetros cuadrados (3.253 millas cuadradas) de selva amazónica perdidos por la deforestación en 2020, utilizando su programa de monitoreo DETER, que analiza imágenes de satélite para rastrear la destrucción mensualmente. Respecto al número de focos de fuego se alcanzaron 222 mil 798 en 2020, una cifra con un 12.73% superior a la de 2019. Y la más alta registrada en los últimos diez años.

La selva muere lentamente

El Pantanal fue el bioma con peor aumento, más del 100 % en comparación con 2019. Los incendios también devastaron los humedales de esta región, un paraíso de biodiversidad que perdió una cuarta parte de su superficie que se incendió el año pasado.

"Los dos años del gobierno de Bolsonaro han sido los peores dos años de deforestación registrados en el programa DETER", dijo Marcio Astrini del Observatorio Climático Brasileño, una coalición de grupos ambientalistas. "Eso no es una coincidencia, es el resultado de las políticas de destrucción ambiental del gobierno actual", añadió en un comunicado a medios.

Un análisis, publicado en noviembre de 2020, fue muy alarmante: descubrió que la deforestación aumentó un 9.5% anual en los 12 meses hasta agosto de 2020, destruyendo 11.088 kilómetros cuadrados de la Amazonía brasileña, un área más grande que Jamaica. Al ritmo que se está registrando la pérdida de bosque está dejando secuelas irremediables en la reserva natural más grande del mundo.

Amazonas; Pantanal
El Pantanal, hogar de muchas especies raras, incluida la población de jaguares más densa del mundo, registró el mayor número de incendios este año desde que comenzaron los registros en 1998.

La destrucción en Brasil, el mayor exportador mundial de carne de res y soja, está siendo impulsada en gran medida por agricultores, ganaderos he inversionistas de tierras que excavan árboles y los queman para dar paso a cultivos. Acciones que a su vez han provocado un aumento de incendios forestales destructivos.