Severa crisis hídrica padece Nuevo León

En medio de una severa sequía, que ha dejado niveles de almacenamiento muy bajos en muchas presas del norte de México, la zona metropolitana de Monterrey enfrenta una grave crisis de abasto de agua potable a la sociedad.

Ciudadanos buscan cómo abastecerse del vital líquido. Fotografía: @SinEmbargoMX

La ciudad de Monterrey, Nuevo León está enfrentando una intensa crisis en materia de abasto de agua a la población. En palabras de expertos, como el Ing. José Luis Lege Tamargo, presidente de Ciudad Posible y ex director general de la Comisión Nacional del Agua, “la falta de agua para la población de la capital neoleonesa, debe tomarse como un aviso de alarma para todo el país”, dijo.

En una columna, continuó su dicho citando: “la sequía del año pasado dejó muchas presas del norte de México con niveles muy bajos; entre otras, las tres principales que abastecen el 50% del volumen requerido en la Zona Metropolitana de Monterrey. Las presas de La Boca y Cerro Prieto, están por debajo del 4% de su capacidad, y la más importante, El Cuchillo, comprometido parte del volumen para riego agrícola”, continuó.

Añadió que: “se requiere cambiar radicalmente la política del agua en el país, con visión de cuenca y de más largo plazo. Tecnificar al máximo el riego agrícola, a los organismos operadores y el uso industrial, estableciendo políticas de cuidado y uso racional del recurso, instalar medidores en todas las tomas domiciliarias, comerciales e industriales, y promover el cobro equitativo”.

Además, dijo: “se deben continuar las campañas en medios de comunicación para evitar el desperdicio y mal uso del agua. Mantener un programa de eliminación de fugas en redes primarias y secundarias; implementar un programa de eliminación de fugas domiciliarias, promoviendo el cambio de mecanismos ahorradores, y sellado de mejor calidad, además de impulsar un programa de sustitución de tuberías, entre otras varias”, concluyó.

Aprovechan fuga de agua para bañarse en la calle

Ha llegado a tal grado la situación, que diversos ciudadanos aprovecharon una fuga de agua para asearse en la calle. Algunos incluso se enjabonaron y se dieron un “baño express”. Otras personas, aprovecharon para llenar recipientes y llevar el líquido a sus domicilios. El hecho causó impacto y admiración, pues el material fue compartido a través de redes sociales.

La limitada disponibilidad que se vive en sitios como Guadalupe, ha llegado al grado que no alcanza ni para darse un rápido “regaderazo”. En el estado de Nuevo León, a principios de junio, el estiaje comenzó a tener sus efectos en escuelas, modificando sus horarios de clases en los niveles preescolar, primaria y secundaria, tanto en los turnos matutino, vespertino, y algunos en horario nocturno.

Ausencia de lluvias y alto consumo de agua

Las autoridades estatales han señalado que, la entidad enfrenta una crisis de falta de agua, debido a dos razones generales: la ausencia de lluvias y el alto consumo del vital líquido, razón por la cual el suministro de este servicio se ha visto complicado de brindarse. El hecho de que se aproveche una fuga de agua para asearse, causa asombro en quienes no viven la citada condición.

Tal como lo cita el Ingeniero Luege: “es urgente establecer modelos de desarrollo urbano, orientados a la recuperación de áreas de recarga de acuíferos, áreas de inundación que funcionen como reguladoras frente a fuertes tormentas, y lagunas de captación donde se almacenen grandes volúmenes como fuentes de abastecimiento”. Sin duda, la crisis en Nuevo León, debe hacer cambiar radicalmente nuestra relación con el agua.