Las Cuarenta Casas, sitio arqueológico que se encuentra enclavado en la Sierra Tarahumara al Norte de México

Este lugar, se localiza a 320 kilómetros al Noroeste de Chihuahua capital, en el municipio de Madera. Dentro de sus atractivos, se ubica la Cueva de la Olla.

Construidas en los abrigos de los acantilados, dentro de la Sierra Madre Occidental. Cortesía: INAH

Las Cuarenta Casas, es un sitio que por sus condiciones arqueológicas, cuenta con una basta historia de miles de años. Su denominación fue acuñado por Alvar Núñez Cabeza de Vaca, en el siglo XVI. Desde entonces lo adoptaron, pues en él se puede encontrar, un número indeterminado de viviendas, que fueron construidas con tierra (adobe) y viguerías.

Para poder llegar, desde Chihuahua capital, se debe tomar la carretera que conduce hacia el poniente, a Cuauhtémoc, de ahí hacia La Junta, para posteriormente llegar a Guerrero, y después de transitar por varios municipios, llegar a la cabecera Municipal de Madera, que, cabe hacer mención, sus pobladores señalan que es uno de los lugares más fríos del país.

De “Ciudad” Madera, como se le conoce, aún hay que desplazarse por la carretera que conduce a El Largo o Mesa del Huracán, hasta llegar al kilómetro 42, donde se encuentra la entrada a este arqueológico lugar. Expertos en arqueología las llaman “Casas de los acantilados” o “Cliff Dwellings, término que data del año 1200.

Este recóndito sitio, se dice que es un asentamiento prototípico de la provincia serrana, que fue habitado por grupos de cazadores, recolectores, fabricantes de cestos y agricultores, con influencias de la cultura de Casas Grandes. Los especialistas en Arqueología, definieron estos dos conceptos, con la intención de interpretar la evolución cultural de estos grupos.

Viviendas dentro de cuevas

Las edificaciones antes descritas, fueron construidas al interior de cuevas, así como al abrigo de acantilados formados de las barrancas. Se cree, que funcionaron, además de asentamientos habitacionales, como talleres. Las 40 casas, fue declarada oficialmente como Zona de Monumentos Arqueológicos en enero de 2002.

Las viviendas, se elaboraron a base de tierra y madera, aprovechando esos abrigos rocosos para cimentarlas; además, los acantilados rocosos de la Sierra Madre Occidental, fueron parte de la “infraestructura” natural que les brinda protección. En años recientes, con las investigaciones, se han logrado registrar más de 180 sitios de este tipo.

Inviernos muy fríos, con nevadas.

El tipo de clima que predomina en este municipio se caracteriza por tener la mayor cantidad de días en el año con temperaturas frías por debajo de los 10 °C al amanecer y anochecer, de ahí que los lugareños señalan que es uno de los sitios más fríos en todo el país.

Las viviendas, se elaboraron a base de tierra y madera, aprovechando esos abrigos rocosos para cimentarlas; además, los acantilados rocosos de la Sierra Madre Occidental, fueron parte de la “infraestructura” natural que les brinda protección.

Es característico también, que por su climatología, se registren precipitaciones durante el invierno, con sus características nevadas, que en años recientes han venido a menos. Por sus climatología, ubicándosele dentro de la Sierra Madre Occidental, sus condiciones son templadas subhúmedas.

Cueva de la Olla

Aunque, como se refería anteriormente, en años recientes las precipitaciones han venido a menos, padeciendo de una intensa sequía, que es palpable al encontrar mucha vegetación (como pastos) secos. Es un impresionante vestigio. De acuerdo a las referencias de expertos, señalan que su ocupación por personas data de 5,500 años A.C.

Es considerado como el más antiguo de Aridoamérica y de todo México. A este, también se le ubica dentro de un abrigo natural, que forma parte de un conjunto, dentro del Valle de las Cuevas. A todo el conjunto, se le tiene catalogado como un valioso tesoro del estado de Chihuahua.

Se dice que este espacio, se empleaba como un importante granero. Cortesía: INAH

Se cultivaba maíz, calabaza y leguminosas

El sitio, recibió el nombre de “Cueva de la Olla”, por el enorme granero que ahí se encontró, de forma circular y que tiene semejanza a una gran vasija, y que desde lejos se aprecia como una vasija de grandes dimensiones. Este asentamiento, fue importante en las relaciones que antiguamente se establecieron.

La antigua ciudad de Paquimé hizo comercio con las regiones costeñas del Océano Pacífico y Golfo de California. En aquel tiempo, sus pobladores originales cultivaron maíz, calabaza y leguminosas, así como recolectaron semillas de yuca, bellotas silvestres y el maguey.

No te lo puedes perder

Por otra parte, cazaban venado, conejo, roedores, así como diversas aves que, además de aprovechar su carne, empleaban sus plumas con fines ornamentales y para intercambio comercial. Lo anterior, se constató debido a las excavaciones que se hicieron hacia finales del siglo XX, en donde se encontraron evidencias, por el Dr. Arturo Guevara Sánchez.

En tu próxima visita al estado de Chihuahua, considera a Las Cuarenta Casas, como un sitio que debes visitar. Recuerda que, por su ubicación, al encontrarse en una parte alta de la región serrana, durante todo el año se tienen condiciones frías a templadas, sobre todo al anochecer y al amanecer.

Durante el invierno, pueden presentarse nevadas y el valor de la temperatura desciende fácilmente por debajo de 0 °C.