El amor en la meteorología: el viento de los enamorados

Los que nos dedicamos a la meteorología tenemos una parte científica y otra de poeta como escribió Thomas Morris Longstreth. Esta ciencia tiene un halo de romanticismo inherente, es una fuente de inspiración y está estrechamente vinculada a los sentimientos, sobre todo al amor. Qué pareja de enamorados no se ha detenido a contemplar una puesta de Sol, o la diversidad de formas y colores que muestra la atmósfera.

En diferentes culturas alrededor del planeta se han tejido leyendas para explicar fenómenos, uno de ellos es el viento, pero no cualquiera, sino el viento de los enamorados. Esta historia que conecta a la meteorología con el amor nos llega de la antigua Grecia, justo en el momento donde humanos y dioses convivían.

Las deidades protagonistas de esta leyenda son Céfiro, dios que controla el viento del oeste y es portador de la primavera; y Apolo, dios de la luz y las artes. Para cerrar el triángulo amoroso llega Jacinto, un hermoso príncipe espartano del cual Céfiro y Apolo sentían un profundo amor.

Cierto día Apolo y Jacinto jugaban a lanzar disco, Céfiro sintió mucho celo y cegado planeó vengarse. El dios del viento aprovechó el momento en el que Apolo lanzó el disco y sopló con fuerza de tal manera que terminó golpeando en la cabeza a Jacinto causándole la muerte. Apolo en medio de la gran tristeza por la muerte de su amado impidió que el dios del inframundo se llevara a Jacinto, tomó su sangre e hizo que de ella brotaran flores, los conocidos jacintos.

Céfiro debía ser castigado y Apolo estaba dispuesto a hacerle pagar. Afortunadamente Eros, Cupido en la mitología romana, lo convenció de que Céfiro había actuado en nombre del amor. En agradecimiento al favor de Eros, los vientos del oeste pasaron a servir para siempre al amor y a ser reconocido como “el viento de los enamorados”.

¿Dónde se presentan los vientos del oeste?

Entre las latitudes 30 ° y 60 ° están presentes estos vientos, justamente donde se localiza gran parte de Norteamérica, Europa, Argentina y Chile. En México solo los estados de Chihuahua, Sonora y Baja California son atravesados por el paralelo 30 ° norte.

¿Existen otros vientos planetarios?

La respuesta es sí, además de los vientos del oeste están presentes los alisios y los polares del este. Estos vientos planetarios o permanentes son una consecuencia del movimiento de rotación de la Tierra y de la diferencia de energía entre las regiones polares y ecuatoriales. Estas circulaciones a escala planetaria se denomina circulación general de la atmósfera, al igual que las corrientes marinas juegan un papel muy importante en la redistribución de la energía en la Tierra.