Sistemas invernales se acercan a México, cruzando en próximos meses. Estos son los efectos que nos estarán ocasionando
El otoño ha comenzado y gradualmente veremos más sistemas típicos de la época cruzando México, generando cambios importantes en las condiciones meteorológicas. ¿Sabes cuáles son los efectos que nos ocasionan?

Recuerden que el otoño meteorológico inició el 1 de septiembre, en función a los cambios atmosféricos, mientras el otoño astronómico fue el pasado lunes 22 conforme el eje del planeta cambia; la frecuencia de frentes fríos con masas polares, corrientes en chorro y hasta vórtices o DANA’s los iremos viendo con más frecuencia gradualmente.
Temporadas estadísticas y eventos de invierno
Sacando un promedio de muchos años, se determina estadísticamente las temporadas meteorológicas que no cambian, aunque la presencia de los sistemas que las caracterizan pueden varias su frecuencia, inicio o fin. La temporada invernal, o mejor conocida como de “frentes fríos y Nortes” comienza entre el 1-15 septiembre y finaliza el 15 mayo.
Estrictamente, el invierno que va de diciembre a febrero, es cuando hay mayor frecuencia y efectos de frío en el país, variando año con año la intensidad y hasta estar intercalados con algunos días calurosos. Aquí podrán leer a grandes rasgos, la definición y consecuencias que se presenta en México de los sistemas de otoño a primavera.
Sistemas meteorológicos invernales y sus efectos
Los frentes fríos son los más comunes, pero erróneamente se da a conocer sus efectos incluso, por el mismo Servicio Meteorológico Nacional. Un frente es la separación o zona de transición entre dos masas de diferentes características de temperatura y humedad; si una masa fría/seca avanza otra cálida/húmeda, se le llama frente frío y sí, es una línea de unos metros de grosor, aunque de miles de km de extensión o longitud.

Un frente frío ocasiona única y exclusivamente nubosidad y lluvias si hay suficiente inestabilidad, por lo que es un error cuando dicen que ocasione ambiente gélido y viento severo, eso es tarea de las masas de aire polar compuestas de un anticiclón frío, que viene inmediatamente tras el paso del frente. Previo a un frente, aumenta viento del sur con calor, para despues ser del norte y frío.
La corriente en chorro, franja de fuerte viento en niveles altos de la troposfera, a más de 8-10 km de altitud sobre nuestra región, cruza por periodos al país con nubosidad y ocasionalmente, lluvias y nevadas. Básicamente, este sistema se encarga de “separar” el aire cálido tropical del frío polar, de donde se generan los frentes fríos y las tormentas invernales.
Este otro sistema, la tormenta invernal es una zona extensa y profunda de baja presión con centro frío, algo como el opuesto de un huracán; la tormenta se asocia a sistemas frontales (frío, cálido, estacionario y ocluido) que visualmente se asemeja a una "coma". Muy rara vez afectan a México, siendo la última vez de forma significativa en marzo de 2016, ¿lo recuerdan?
Errores técnicos, pero lo importante es prevenir
El sistema con el que se confunden en SMN y le llaman erróneamente son las DANA´s, término español que proviene de Depresión Aislada de Niveles Altos, donde se define a también a una circulación ciclónica como la tormnta invernal, pero que se encuentra sólo a 5 km de altitud y NO se asocia a frentes fríos.

Si en México vemos un mapa con una “tormenta invernal” sin frente frío, sabemos ahora que está mal y el término correcto es DANA. Este sistema ocasiona lluvias, nevadas y fuerte viento en un área mucho menos extensa que la tormenta invernal, pero que eventualmente son muy potentes localmente como sucede en el noroeste del territorio mexicano.
Tendencia para las próximas semanas y meses
Como se ha venido informando, este otoño e invierno pueden presentar condiciones típicas, lo que implica ambiente frío normal o clásico con menos periodos de calor, mientras las precipitaciones estarían dentro de lo habitual, entendiéndose como lluvias ocasionales, limitando un ambiente muy seco.
Sin embargo, hay varios escenarios de modelos a largo plazo, tanto estadísticos como dinámicos, que indican periodos lluviosos y de intenso frío, contrastando con inviernos recientes que más bien, fueron un tanto calurosos y secos. Por tanto, se mantiene la previsión del invierno 2025-2026 frío o más frío de lo habitual y lluvias típicas.

Muchos comentan que ya no debería sentirse calor en septiembre, pero es incorrecto, ya que septiembre naturalmente es húmedo y lluvioso en el país a pesar de ser parte del otoño, aunque en los últimos días comienzan los cambios. Para octubre se observan más de 5 frentes con lluvias, seguido de masas polares importantes, especialmente en la segunda quincena sobre la mitad centro-oriente del territorio mexicano.