La forestación una alternativa contra el calentamiento global

Los bosques no solo son clave para moderar el clima al absorber el carbono atmosférico, sino que también crean un efecto de enfriamiento al aumentar las nubes bajas.

Forestación
La siembra de arboles favorece el aumento en la cobertura de nubes en niveles bajos

Una evaluación global de la Agencia Europea Espacial (ESA, por sus siglas en inglés), dice que datos de los satélites espaciales revelan cómo la presencia de bosques aumenta la presencia de nubosidad y mantienen un clima frío.

Observaciones y análisis satelitales recientes determinaron que las aéreas donde se han llevado a cabo el establecimiento de plantaciones forestales en terrenos en donde no hay evidencia de que existió antes vegetación forestal (forestación), da paso a la presencia de cobertura de nubes en diferentes tipos de bosques.

El hallazgo científico sin lugar a duda podría ser un remedio para el aumento de las temperaturas tanto a escala global como localizada, sabiendo que es una de las preocupaciones primordiales ligadas a los efectos nocivos del cambio climático.

Primera evaluación mundial

Se utilizaron observaciones satelitales, que han demostrado que en dos tercios del mundo la forestación aumenta la cobertura de nubes bajas, siendo el efecto más fuerte en los bosques siempreverdes de hojas aciculares.

Debido a que los árboles secuestran el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera y lo convierten en biomasa, los bosques son ampliamente defendidos por su papel en la mitigación del cambio climático. Sin embargo, lo que ha sido menos claro es cómo los bosques afectan el clima de otras formas, como su papel en el ciclo del agua y el equilibrio energético de la superficie.

El documento, publicado recientemente por la revista Nature, muestra cómo se utilizaron registros de datos globales de cobertura fraccional de nubes y tierra producidos por la Iniciativa de Cambio Climático de la ESA para examinar el efecto de la transición de la cobertura vegetal a bosques caducifolios y siempreverdes.

El reporte describe cómo las nubes aumentan generalmente durante todo el año en áreas forestadas en regiones templadas, tropicales y áridas, a veces hasta en un 15%. Sin embargo, durante el invierno boreal y la primavera en el Hemisferio Norte, cuando existe una capa de nieve prolongada, los autores encontraron una reducción en la capa de nubes. Mientras que, durante el verano boreal, tiene aumentos fuertes y consistentes en la fracción de nubes en aproximadamente un 5%.

Conclusiones de los científicos

"Las observaciones de la Tierra muestran cada vez más que los árboles y los bosques están afectando directamente el comportamiento del clima global y localizado, al afectar las propiedades biofísicas de la superficie", dice uno de los coautores del estudio, Alessandro Cescatti.

"Sin las observaciones del tipo de cobertura terrestre y nubes globales desde satélites, este estudio no habría sido posible a escala global", dice Martin Stengel, quien no participó en el estudio pero lidera el proyecto de la Iniciativa de Cambio Climático en la Nube. "Los autores de este estudio apreciaron la alta resolución espacial de los productos de la iniciativa".

Dr. Cescatti agregó: "Estudios como este, basados en observaciones satelitales robustas, son fundamentales para caracterizar la complejidad del sistema climático y proporcionar puntos de referencia para el desarrollo de modelos climáticos".

A favor de la restauración de los bosques

El equipo enfatiza que la mitigación del clima terrestre a través de la forestación/reforestación y la deforestación evitada no debe razonarse únicamente en términos de captura de carbono.

Sino que también, las políticas deben incluir los beneficios climáticos más amplios que ofrecen los bosques, incluido el aumento de la cobertura de nubes para el enfriamiento y la generación de lluvias, lo que otorga a los bosques un valor hidrológico adicional.