NOAA predice una temporada de huracanes en el Océano Atlántico superior a lo normal para 2025

En los últimos años las temporadas de ciclones tropicales han sido más activas y destructivas, por ello es indispensable mantenerse al informado sobre las publicaciones ofrecidas por dependencias oficiales, respecto al pronóstico de huracanes.

Huracán Isidoro sobre la Península de Yucatán
El 23 de septiembre de 2002, el huracán Isidoro se detuvo sobre la península de Yucatán, agitando las olas y provocando fuertes lluvias en la región. Fuente: MODIS / NASA / NOAA

De acuerdo con la primera versión oficial de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por siglas en inglés), la temporada de huracanes del Atlántico de 2025, que va del 1 de junio al 30 de noviembre, se predice un 30 % de probabilidad de una temporada casi normal, un 60 % de probabilidad de una temporada superior a lo normal y un 10 % de probabilidad de una temporada inferior a lo normal.

En otras palabras, el comportamiento de este año en cuanto al desarrollo de ciclones tropicales se espera sea superior a lo que cotidianamente ocurre en el registro histórico. Siendo uno de los factores favorecedores en el incremento, el calentamiento anómalo en diversas regiones del Atlántico que contemplan al Golfo de México y Mar Caribe.

En números, NOAA pronostica un rango de 13 a 19 tormentas con nombre (vientos de 63 km/h o superiores). De estas, se pronostica que entre 6 y 10 se convertirán en huracanes (vientos de 119 km/h o superiores), incluyendo entre 3 y 5 huracanes mayores (categorías 3, 4 o 5; con vientos de 179 km/h o superiores), con un 70 % de confianza en estos rangos.

Infografía NHC
Una infografía resumida que muestra la probabilidad de la temporada de huracanes y el número de tormentas con nombre pronosticadas. Crédito de la imagen: NOAA / NWS

Factores que influyen en las estimaciones de la NOAA

Se espera que la temporada sea superior a lo normal debido a una confluencia de factores, como la continuidad de las condiciones neutrales del ENOS , temperaturas oceánicas superiores a la media, pronósticos de cizalladura del viento débil y la posibilidad de una mayor actividad debido al monzón de África Occidental, principal punto de partida de los huracanes del Atlántico.

La era de alta actividad continúa en la Cuenca Atlántica, caracterizada por un alto contenido de calor en el océano y una reducción de los vientos alisios. Este mayor contenido de calor proporciona más energía para impulsar el desarrollo de tormentas, mientras que la menor intensidad de los vientos permite que las tormentas se desarrollen sin interrupciones.

Esta temporada de huracanes también presenta la posibilidad de un desplazamiento hacia el norte del monzón de África occidental, produciendo ondas tropicales que generarán algunas de las tormentas atlánticas más fuertes y duraderas.

“Este pronóstico es un llamado a la acción: estén preparados. Tomen medidas proactivas ahora para elaborar un plan y reunir suministros para asegurarse de estar listos antes de que se presente una tormenta”.

Declaró Ken Graham, director del Servicio Meteorológico Nacional de la NOAA.

Por el contrario, tenemos que en el Océano Pacifico en su región central se espera que se comporte más mesurado, incluso menos activo, esto al igual que en el Atlántico será por muchos factores y patrones climáticos donde juega un papel importante la temperatura oceánica principalmente.